La moda sostenible se alimenta con tejidos responsables y, por ejemplo, un pantalón ecológico con un bonito diseño, sorprendería a las más exigentes coolhunters.

Ya no es suficiente con aprender a combinar todo tipo de prendas para intentar sacar el máximo provecho de nuestro armario. Ahora la tendencia también se manifiesta a través de un mundo sostenible, una necesaria puesta en marcha para que el planeta siga su curso natural.

Necesitamos tejidos innovadores, elaborados con otras prendas recicladas o nuevos textiles inventados con eficiencia y beneficios para la piel y el medio ambiente. 

En este último ejemplo es necesario también tener en cuenta que además del medio ambiente, las prendas que tenemos pegadas a nuestra piel deben ofrecer la capacidad de resolver los conflictos constantes que tenemos con los diversos e incesantes cambios de temperatura que podemos llegar a tener, “en tan sólo un día podemos llegar a tener hasta 5 estaciones”.

No olvides que tu cuerpo ya no estaría a merced de los golpes y cambios de temperatura, podría decirse que actúa como una segunda piel.

En una sola frase, la necesidad actual al vestirnos se centra en que, la ropa debe ayudarnos a termo regular mejor la temperatura corporal. Es una necesidad. Y para ello que mejor que un pantalón ecológico, por ejemplo. 

Ya tenemos a nuestra disposición prendas preciosas, llenas de un diseño cuidado y a la altura de las jornadas de trabajo o incluso aptas para ir con un estilo envidiable a cualquier ceremonia o evento. Eso sí, luego poder llevártela a la ofi, como tiene que ser. 

La moda sostenible ya empieza a formar parte de nuestra imagen con la misma exigencia que le damos, lo que hasta ahora queríamos con el resto de nuestros estilos. Ahora sí, tenemos magníficos modelos que nos dejan fascinada. Formas, diseños y confecciones, hechas para poner mucho sin perder ni un ápice de clase y personalidad.

Yo empecé hace unos años buscando una marca de ropa ecológica y totalmente certificada, que desarrollara prendas cargadas de estilo, que nos pudiéramos poner para ir al trabajo o poder llevar a algún evento. Con el añadido de que su precio fuera competitivo con respecto al mercado. Y lo conseguí.

Llevo trabajando con SKFK cuatro temporadas y tengo que decir que la acogida en la tienda ha sido formidable. Lo más curioso de esto, es que cuando empecé a contar un poquito a cada una de mis clientas de que iba todo esto, tuvo muy buena acogida por lo que representaba y que los diseños eran super bonitos. Pero lo que realmente acabó por convencer, fue como una a una y a medida que se iban poniendo este tipo de prendas, se sorprendían con el fenómeno de termo regular mejor la temperatura corporal. Y a partir de esa experiencia ya no hay marcha atrás. Es lo que más deseas ponerte. No te lo puedo explicar mejor es algo que tienes que experimentar.

Una de las últimas adquisiciones fue el pantalón ecológico verde para mujer que vino a formar parte de nuestro equipo textil para esta temporada de otoño – invierno. Nos enamoró el diseño original que una vez puesto, compruebas lo bien que sienta la caja, algo muy difícil en la mayor parte de los pantalones, y lo fácil que resulta mezclar y combinar con lo que apetezca.

Como anécdota, tengo que contar que tengo algunas clientas que ya hacía mucho tiempo que no se ponían ninguna prenda por dentro del pantalón, por esto de, “que si no me favorece y prefiero tapar o que si tengo barriga y quiero tapar”. Sin más esfuerzo que comprobando por sí mismas, hemos conseguido que se lleven puesta la prenda superior por dentro. Algo impensable para ellas. 

Como mis primeros pasos en este mundo de la moda, fueron la escuela de la sastrería y confección, siempre digo que lo importante es una materia prima con calidad, un diseño cuidado aunque sea sencillo y un magnífico patronaje. Y esta prenda lo tiene todo. 


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