¿Sabes cómo es posible comprar pantalones vaqueros push up que parezcan iguales que cualquier otro vaquero pero que sientan de diez? En todos los tejidos que conozcas existen calidades que los diferencian unos de otros, pero además el arte del patronaje y la confección debe tener métricas exactas que los avalen. Todo esto da como resultado ropa que cuando te la llevas puesta, aprecias clara y rápidamente las diferencias que existen entre unas y otras prendas.

La calidad de las materias primas son el primer paso a encargarse cuando se va a llevar a cabo una colección. En este caso y para el tipo de prenda de la que hablamos, será el algodón. Este material que todos conocemos tan bien, puede ser que desconozcas los variadísimos niveles de calidad que existen y que dan un resultado totalmente diferente según la fibra usada. 

Los algodones orgánicos, por ejemplo, tienen una calidad superior a otras fibras de su misma familia, pero además también son cultivos en los que el tratamiento ecológico es limpio para el producto final y para la tierra. Ellos están libres de químicos contaminantes que dañan el medio ambiente y el agua necesaria para su cultivo es muchísimo menos a la de sus homólogos. Es también un punto fuerte a la hora de evitar irritaciones o alergias en tu piel ya que son telas naturales. Todos estos detalles y algunos otros, en lo que respeta simplemente a estos tejidos, ya supone un adelanto cuantitativo para tu piel y para la tierra.

La segunda variable que garantiza que los pantalones vaqueros push up te queden en el cuerpo como si se los hubieses pedido hacer a medida a un gran diseñador es el patrón interpretado y llevado al papel, para posteriormente recortarlo sobre el denim. Sí, el calculo necesario para elaborar un patrón perfecto, es un buen profesional que ponga en practica las fantásticas fórmulas que son matemática pura, y que sólo los muy buenos saben plasmar en los tejidos. Para esto también se hace necesario saber interpretar o leer las telas. Los diferentes gramajes, las formas en las que se fabrica un hilo y sus variadísimos hilados, hacen que los resultados sean muy diferenciados unos de otros.

Parte del arte de los buenos diseñadores consiste en saber el tipo de torcedura del hilo, es una fórmula perfecta para colocar los patrones sobre el tejido, en la dirección más adecuada y conseguir efectos originales y buscados, que de ninguna otra forma podrían conseguirse. Lo dicho, auténticos genios. 

Una vez tenemos cortada la tela vaquera y en cuanto damos comienzo a las costuras y pespuntes, hacerlo con mimo y por parte de buenos profesionales, es el paso final que garantiza que los pantalones vaqueros push up tienen el tan deseado efecto Slim. Este trabajo una vez lo tenemos puesto, el efecto sobre tu cadera, cintura y piernas es lo más estilizado y con un efeto tonificado visual en esa parte de tu cuerpo. En la tienda online puedes echar un vistazo al modelo que trabajamos desde hace ya seis años. Es una prenda con todas estas características más que probadas por muchas de vosotras y que seguís repitiendo, pero es que además, el color es muy elegante, lo que te permite llevarlo a sitios en los que la imagen debe estar un poco más cuidada.


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